Se llenó la pantalla de televisión con escenas de las bombas
en el Marathon de Boston y las
declaraciones de “expertos” en bombas y terrorismo de todo el mundo, desde el
domingo además de ese medio de comunicación, nos invade un internacionalismo verdaderamente
frenético.
Venezuela fue la primera gran causa durante la noche del
domingo y la mañana del lunes, los “expertos” nos trajeron “información” y “datos”
que en ocasiones ni nos imaginamos, así pudimos escuchar a León Krauze (siempre
“atinadísimo”) con un muy “serio análisis” de las perspectivas de lucha del “valiente
pueblo” venezolano y el “estrepitoso derrumbe” del chavismo.
Además de una serie de declaraciones de diversas personas e
instancias, pronunciándose a favor del “voto por voto” pues la “incertidumbre”
es mayúscula, sin recordar, sin querer acordarse, sin memoria, sin historia y
sin correlacionar el caso México 2006 (claro eso pasó en ese país tan alejado
de los mexicanos.
Ya hoy en a mañana escuché a uno de esos internacionalistas
especulando respecto de la posible autoría del atentado de Boston de grupos
extremistas internos o externos que están en contra de la reforma migratoria,
SALUD.
Estamos inmersos en dinámicas informativas que poco o muy
poco nos importan y nos impactan, que casi no nos importan pero que sin embargo
entran a nuestras casas y a nuestra mente de una manera sistemática y casi
exclusiva, como si aquí, no pasara nada.
Habría que recordarles a los “editorialistas” que el matatón
de Tamaulipas, Michoacán y otras entidades federativas se desarrolla a diario,
que en la zona conurbada del DF los actos de violencia son cotidianos, que hay
un proceso legislativo en curso, que somos presas de una continua inflación y
carestía, que el gobierno mexicano está usando recursos públicos para actos
propagandísticos en lugar de acciones de gobierno.
Habría que platicar con los “comunicadores del régimen” para
que se enteren de lo que pasa aquí, en este lugar tan cercano a los mexicanos,
pero tan alejado de la realidad de los medios.
SALUD.
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